En octubre del año pasado se da por finalizado el contrato de locación del inmueble donde funcionaba el programa en calle Uruguay, lugar donde desarrolló su función por unos 10 años. A partir de esto el programa no cuenta con un espacio físico acorde para el desarrollo de sus tareas.
Cabe destacar que el programa de violencia social nace en el año 2004 de la entelequia de la Psp. Claudia Izza, en una primera instancia, con el propósito de brindar una serie determinada de capacitaciones orientadas a concientizar sobre la problemática: tanto a efectores del Ministerio de Salud, como así también a distintos organismos dentro de los estamentos del Estado.
Con el correr de los años se originó el servicio de Abordaje Integral de las personas en situación de violencia y trabajan un total promedio de 17 agentes entre Profesionales y Administrativos. La falta de lugar físico acorde a la tarea hoy tiene como consecuencia directa una caída de la intervención de un 71% respecto a lo atendido en el primer bimestre del 2022, es decir la capacidad resolutiva de atención de este Programa se ve gravemente comprometida.
Desde ATE acompañamos a las y los delegados y a los demás trabajadores del organismo en el reclamo de una pronta solución a esta situación.
